Mientras uno sepa que vive entre destrucciones, puede sobrevivir.
Te comparto el díptico de un poeta perdido -Víctor Hugo Romero, se llamaba el jefe- que siempre me ha gustado y siempre pienso que pondré de epígrafe de alguna novela:
En el orden que no habrá Te prometo divertirme con escombros.
N. e Igui aprecian mucho tu comentario. El díptico que dejas en el blog es excelente, N. e Igui sienten que, por lo menos algunos recordarán las palabras de ese poeta perdido.
N. e Igui agradecen el comentario. Leyeron el artículo y les pareció muy interesante el culto a Shivá. Más que eso, les fascinó el balance que proporciona hacer de la destrucción un objeto de culto.
8 comentarios:
Mientras uno sepa que vive entre destrucciones, puede sobrevivir.
Te comparto el díptico de un poeta perdido -Víctor Hugo Romero, se llamaba el jefe- que siempre me ha gustado y siempre pienso que pondré de epígrafe de alguna novela:
En el orden que no habrá
Te prometo divertirme con escombros.
Suerte, N!
Y yo, que soy una persona plácidamente feliz, a veces busco medios de destrucción artificial.
es bellísimo N., quizá lo más bello y profundo que te he leído...
http://es.wikipedia.org/wiki/Shiv%C3%A1
Y al final siempre deseamos la destrucción. Fantástico como siempre N.
Saludos.
Rufián Melancólico (VIR):
N. e Igui aprecian mucho tu comentario. El díptico que dejas en el blog es excelente, N. e Igui sienten que, por lo menos algunos recordarán las palabras de ese poeta perdido.
Saludos. :)
Kentucky Freud Chicken (VIR):
N. e Igui te preguntan, ¿los medios de los que hablas, son auténticamente artificiales?
Saludos.
Talamentes (VIR)
N. e Igui agradecen el comentario. Leyeron el artículo y les pareció muy interesante el culto a Shivá. Más que eso, les fascinó el balance que proporciona hacer de la destrucción un objeto de culto.
Saludos. :)
Dr. Dulcamara (VIR):
N. e Igui agradecen el comentario, pero no podrían afirmar que el deseo más fuerte es el de la destrucción.
Saludos. :)
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